7 señales del final de la vida útil de un coche
- octubre 27, 2023
- Recambios originales
Nada es para siempre, tampoco los automóviles. Con las labores de reparación y mantenimiento que realizas en tu vehículo alargas al máximo su vida útil, pero al final llega un momento en el que todos los vehículos tienen que enfrentarse a un declive inexorable y presentan averías demasiado caras de arreglar o simplemente una pérdida progresiva de fiabilidad. En definitiva, dejan de ser aptos para el uso diario común.
En este artículo repasamos siete indicios que nos alertan de que un coche se está acercando al final de su vida útil.
1. Los testigos saltan continuamente
Es normal que los testigos salten de vez en cuando porque hay un nivel bajo de aceite, porque falta líquido limpiaparabrisas… De hecho, su cometido es precisamente alertarnos de que algo va mal para que podamos solucionarlo y asegurarnos de que todo sigue funcionando perfectamente. Sin embargo, un coche en el que los testigos saltan continuamente es un coche que pide ayuda de forma desesperada. Sobre todo, si alerta de problemas potencialmente graves como una anomalía en los gases.
2. Emite un humo blanco y espeso
Saber interpretar el humo emitido por el tubo de escape es una herramienta de diagnóstico excelente para identificar problemas. Por ejemplo, si el color es azulado es síntoma de que el motor quema demasiado aceite y hay que revisar las válvulas y los anillos de pistón. Si es blanco y espeso significa que está quemando líquido refrigerante. En este caso puede deberse a averías muy graves, como una grieta en el bloque motor o en la junta de culata.
3. La correa de distribución se rompe
La vida útil de la correa de distribución oscila entre los 80.000 y los 120.000 kilómetros. Llevarla más allá supone arriesgarse a que acabe rompiéndose, y esta es una de las averías más caras de reparar. Porque se detiene la sincronización de los pistones y las válvulas, por lo que éstas se acabarían tocando y se doblarían.
4. El bloque del motor está agrietado
Si encuentras una grieta o incluso un agujero en el bloque motor, es una avería tan cara que puede ser momento de plantearse si merece la pena invertir en su reparación.
5. Aparece una avería en los inyectores
Esta es una de las averías más caras de arreglar en los coches diésel, y cuando aparece fácilmente se extiende a todo el sistema de inyección del motor. En estos casos hay que sustituir todos los inyectores.
6. Hay problemas en la junta de la culata
La culata es una pieza de apariencia simple, pero los recambios son caros y las reparaciones laboriosas. Fácilmente superan las 24 horas de trabajo.
7. El temido gripaje del motor
Esta es la avería más grave para un motor de gasolina o diésel. Un coche gripado solo puede arreglarse con una complicada operación a motor abierto.
Al final todas estas averías graves pueden tener solución si el cliente está dispuesto a hacer un desembolso importante de dinero, normalmente porque el coche tiene un gran valor sentimental. Sin embargo, lo más habitual es que prefieran darlo por irreparable.
En QUADIS Recambios somos especialistas en mecánica de vehículos y trabajamos de forma exclusiva con Recambios Originales. Puedes contactar con nosotros llamando al 93 223 84 85 o a través del siguiente formulario.