¿Cómo ha afectado la norma Euro 6 en las tecnologías de los motores?

La llegada de la normativa anticontaminación Euro 6 en cuanto a las emisiones de gases tóxicos de los motores de explosión ha supuesto una bajada drástica en las cifras, especialmente de Óxidos de Nitrógeno, los famosos NOx, uno de los gases más contaminantes que emiten los motores gasolina y diésel.

Este recorte drástico en las emisiones máximas permitidas por los motores ha obligado a los fabricantes a desarrollar sistemas que permitan «purificar» más los gases de escape. Uno de los principales sistemas es el de inyección de AdBlue. Desde enero de 2014 está vigente este sistema y desde 2015 es obligatorio en los motores fabricados, por lo que cada vez más vemos estos sistemas equipados en vehículos medios o de alta gama con los motores diésel más potentes.

Los sistemas AdBlue funcionan en combinación con un catalizador SCR, que disminuye la concentración de NOx gracias a las reacciones químicas que se realizan en su interior.

El AdBlue consiste en una mezcla de Urea y Agua que al reaccionar se descompone en Amoníaco y Dióxido de Carbono gracias a las altas temperaturas del escape. El Amoníaco reacciona con los NOx gracias al catalizador SCR. De esta reacción se obtiene nitrógeno y agua y se eliminan los gases tóxicos peligrosos para la salud.

En estos sistemas se utilizan depósitos secundarios al del carburante, de aproximadamente 20 litros. Su consumo se estima en un 3% del de carburante, en litros/100km. Este líquido puede reponerse en un taller mecánico, así como en algunas gasolineras, que poco a poco van añadiendo este líquido a su oferta.

¿Y que ocurre si se termina el depósito de AdBlue? Pues los fabricantes ya han pensado en ello y la centralita está programada para avisar de falta de líquido con suficiente antelación como para recorrer unos centenares de kilómetros. Y es que si no hay AdBlue el sistema no funciona y el vehículo entra en modo avería y no puede seguir circulando, ya que no actuaría bajo las emisiones homologadas con este sistema.

De todas formas, algunos fabricantes han homologado motores con la norma Euro 6 sin el uso de AdBlue, recurriendo a otras tecnologías como la mejora de la combustión o mayores cilindradas para las potencias que ofrecen.

En cuanto a mantenimiento, más allá del rellenado del depósito, el AdBlue no presenta ningún mantenimiento programado, así que dependiendo del kilometraje anual, se gastará más o menos cantidad de AdBlue, que en comparación con el litro de Diésel, es mucho más barato.

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