Quadis prepara un Mercedes-Benz 250 CE de rally – La mecánica
- octubre 9, 2015
- Históricos CRO
Recientemente los concesionarios oficiales Mercedes-Benz de la red Quadis han celebrado la puesta en marcha del equipo de competición Mercedes Quadis ClassicTeam. Bajo este nombre, la escudería ha preparado un magnífico Mercedes-Benz 250 CE del año 1969 (chasis W114) para participar en el Rally Costa Brava Històric, una de las pruebas de regularidad con más solera de nuestro país.
Mercedes-Benz es una marca innovadora y líder en tecnología que además cuida de sus clientes de todas épocas como ninguna otra, y por ello cuenta con un magnífico servicio de recambio original para sus vehículos clásicos.
El coche, que ha sido reconstruido recientemente en la sede de MB Motors en Granollers –con la total implicación del Mercedes-Benz Clàssic Centre Barcelona, permite que el equipo dé el salto al mundo de la regularidad con clásicos bajo la batuta de uno de los mejores tándems en esta especialidad: Sergi Giralt y Magdala Prats.
Autolica creó hace aproximadamente un año su servicio para clásicos Automóviles Fernández – Mercedes-Benz Clàssic Centre Barcelona, recuperando el nombre histórico del primer concesionario y representante exclusivo de Mercedes-Benz para España a principios de los años ’30, lo que ha permitido asegurar una labor seria y con pleno conocimiento técnico del 250 CE, y que ha sido de mucha utilidad para poder pedir el recambio original necesario a través de CRO.
La decisión de entrar en el mundo de los clásicos se empezó a fraguar al disponer QUADIS de esta bonita unidad 250 CE (W114) y, obviamente, por contar con el servicio técnico y suministro de recambio original adecuado para la profunda labor de recuperación necesaria.
Además de trabajos de acondicionamiento de chasis, carrocería y motor, se sustituyeron en el tren de rodaje amortiguadores, muelles, llantas y equiparon neumáticos de competición.
También fue sustituido todo el conjunto de embrague incluyendo el bombín, manguitos de refrigeración, tubos de combustible y de respiración del depósito, bomba de gasolina, filtros de combustible (vano motor y depósito), filtro de aire, termostato de refrigerante, correas, batería, bujías, alternador, bobina de encendido, instalación eléctrica de la bomba de gasolina y del ventilador eléctrico adicional, escobillas del limpia-parabrisas, todos los líquidos y aceites (anticongelante, aceite motor, valvulina del cambio y diferencial, embrague, dirección asistida, líquido de frenos DOT5), silentblocks del sistema de escape (del que se eliminó un silenciador), casquillos de transmisión (cardán), casquillos del varillaje de la palanca de cambio, flector de transmisión y rótulas de dirección.
Una modificación completa que también incluía desmontar y modificar el sistema de aire acondicionado, sistema de frenado con discos ventilados, latiguillos, y unas pinzas de freno nuevas.
De cara a reconvertir el coche en un auténtico vehículo de competición, las modificaciones llegaron también a su interior, incluyendo vaciado del interior del coche para rebajar peso, cambio de las antiguas butacas por bacquets y arneses de competición; nuevo volante racing; iluminación con barras de LEDs; iluminación interior para el copiloto, protectores de cárter y faldones; la placa de matrícula delantera clásica, la estrella, anagrama MB y tiras cromadas de la parrilla, y como no, la instalación de sondas y aparatos de medición Blunik, el imprescindible instrumento de trabajo del copiloto para los tramos de regularidad.
Además se restauró el radiador, y se ajustó el encendido, platinos, inyección, y las presiones de gasolina. A excepción de discos de frenos, amortiguadores, asientos, cinturones, volante, luces LED y equipo de navegación, el resto de componentes utilizados han sido recambios originales, demostrando la importancia de estos elementos, que permiten no sólo mantener el vehículo en perfecto estado aún con el paso de los años, si no que también ayudan a la mejora de prestaciones de este.
Este coupé de Mercedes, sobrio y señorial, estaba considerado un auténtico lujo en su época, ofreciendo una conducción cómoda y racional. Se trata de un modelo muy significativo dentro de la historia de la marca, ya que fue la primera versión coupé de la clase intermedia, la «Clase E», y además el primer Mercedes-Benz de la historia en montar inyección electrónica (la “D-Jetronic”), toda una innovación en 1968. Este 250 CE equipa un motor de 6 cilindros en línea de 2.496cc y 150 CV a 5.500 rpm, con la caja de cambios manual de 5 velocidades, que era opcional en la época. El motor ha sido revisado y puesto a punto, pero no ha recibido ninguna modificación, demostrando la enorme fiabilidad del propulsor alemán.
Este 250 CE es realidad gracias a la voluntad de MB Motors y la trayectoria y experiencia del Mercedes-Benz Clàssic Centre Barcelona «Automóviles Fernández», servicio oficial de Autolica que cuenta con personal técnico especializado en los modelos clásicos, utillaje oficial específico, documentación técnica original y las garantías en recambios y mano de obra que corresponden a un servicio oficial Mercedes-Benz.
Automóviles Fernández ofrece servicio de mantenimiento, reparación y restauración integral de cualquier modelo Mercedes clásico, incluyendo la generación W201-W124-W126-R129, asesorando y promoviendo su conservación y funcionamiento en estado original. Como el taller está integrado dentro de las modernas y amplias instalaciones de Autolica, en la calle Motors 144 de Barcelona, se asegura así el respeto a todos los requisitos medioambientales. Además, el correcto mantenimiento y puesta a punto de los Mercedes-Benz clásicos con su recambio original, garantiza su funcionamiento más eficiente y ecológico.
Próximamente repasaremos la participación del Mercedes-Benz 250 CE del Mercedes Quadis ClassicTeam en el Rally Costa Brava Històric. ¿Habrá sido capaz este vehículo de 1969 de completar las cuatro etapas de la prueba, con 1.470 km de recorrido y 36 tramos de regularidad?